Está todo listo para que el gobernador Francisco Pérez viaje a China y permanezca fuera de la provincia por diez días. Pero ante la ausencia del mandatario, el Ejecutivo no dejará de lado la gran apuesta del gobernador: reforma constitucional.

Esto es así, porque mientras el gobernador mendocino esté en pleno vuelo a China; el ministro político de Pérez, Félix González tendrá una reunión con el coordinador del área de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Cuyo, Juan Carlos Aguiló, este jueves al mediodía.

La reunión con Aguiló no es casual.

Por un lado, el Gobierno aspira a torcer el brazo de los legisladores opositores mediante el convencimiento de organizaciones e instituciones sociales.

Por otro lado, la UNCuyo fue una de las primeras en apoyar la reforma constitucional e incluso, su rector Arturo Somoza le acercó al gobernador una serie de puntos que debía contener el proyecto de reforma constitucional y muchos de ellos fueron insertados en el proyecto que el Ejecutivo envió a la legislatura provincial.

La reunión con Aguiló es solo una de las patas de la pelea que lleva el Gobierno adelante, ya que la otra lucha está en la Legislatura, donde el oficialismo tiene el número necesario para tratar el proyecto de reforma en el Senado, pero le faltan votos en la cámara de Diputados, donde solo cuentan con el apoyo radical de las diputadas Liliana Vietti y Teresa Maza.

No obstante, en Casa de Gobierno y en la Legislatura admiten que están en conversaciones con la oposición.

En ese sentido, todas las miradas están puestas en los legisladores que le responden al senador nacional Ernesto Sanz, y que suman cinco.

Pero también apuntan al partido demócrata, actualmente dividido en dos sectores, uno liderado por el diputado nacional Omar De Marchi y el senador provincial Carlos Aguinaga y el otro, por el intendente de San
Carlos Jorge Difonso y el diputado provincial Aldo Vinci.

Incluso, desde el PJ no descartaron que en los próximos días pueda surgir algún anuncio desde este último partido, más allá de que Aguinaga ha sido uno de principales opositores a la reforma constitucional, mientras que Difonso también se ha mostrado en contra de una reforma tan grande y solo a favor de una enmienda por año, en lo que él mismo definió como una postura histórica de su partido.