De aprobarse el proyecto de Ley que ya tiene media sanción en el Congreso de la Nación, todas las personas que prestan servicios de cuidado y limpieza en domicilios particulares tendrán los mismos derechos y obligaciones que el resto de los empleados públicos y privados del país.

Así trascendió en todo el territorio, cuando la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad sin debate previo (con 193 votos) la iniciativa que busca posicionarse bajo el título de "Régimen especial de contrato de trabajo para el personal de casas particulares".

Este avance en materia legislativa no sólo estipula que quienes se dedican a tareas domésticas a cambio de un sueldo podrán tener -amparados por una Ley- vacaciones pagas, licencia por maternidad e indemnización por despido. También deberán percibir el proporcional por horas extra y desempeñar tareas los fines de semana.

Pero el proyecto también establece un nuevo amparo contra el trabajo infantil, puesto que establece la prohibición por parte de los empleadores de solicitar labores a menores de 16 años; a contra marcha del decreto que está vigente en la actualidad y que fija en 14 años la edad.

Además, se aclara en la norma que los adolescentes de 16 a 18 años sólo podrán trabajar hasta seis horas por día o 36 semanales, debiendo retirarse del lugar. Según trascendió, la sanción en Diputados fue solicitada por la propia presidenta Cristina Fernández, durante la apertura del período de sesiones ordinarias del Congreso.

Más allá de esto, lo cierto es que de transformarse en ley el proyecto, no sólo las empleadas domésticas estarán contempladas bajo un régimen más estricto al actual. Personal de mantenimiento (como jardineros) o que desempeñe una responsabilidad dentro de la casa de un privado, como por ejemplo los choferes, quienes ofrecen servicios de seguridad y aquellas personas que se dedican al cuidado de enfermos, deberán tener los mismos beneficios que el resto de los trabajadores.

Otro aspecto importante es el límite horario. En principio, el documento que contó con el aval de la Cámara Baja establece que la jornada será de ocho horas; las horas extra se pagarán 50 % los días hábiles y 100 % los fines de semana.

Por otra parte, se prevé un régimen de licencias (embarazo, maternidad y enfermedad), similar al establecido por la Ley de Contrato de Trabajo. Sobre los pasos a seguir por parte del empleador se determinó que tendrán 120 días para regularizar la situación de sus contratados a partir de la reglamentación de la ley.

Mientras, la realidad muestra que el servicio doméstico figura entre los oficios más postergados e irregulares en todo el territorio. Según los datos del Ministerio de Trabajo, en el país hay casi un millón de personas que se dedican a estas tareas y de ellas 90 % que trabaja no está registrada.

Mendoza no es ajena, ya que si bien la regulación se realiza por medio de la AFIP, donde este personal debe aparecer inscripto, el trabajo en negro sigue a la orden del día. De hecho, las denuncias efectuadas en la Subsecretaría de Trabajo por parte de los empleados contra sus empleadores "son muy frecuentes", según adelantó Sebastián Godoy Lemos, titular de esta cartera.

En el caso de que la Ley se apruebe, todos estos casos se resolverán directamente en la Justicia. Ahora el trámite es de índole administrativa y suele quedar resuelto a través de un arreglo de dinero entre el empleador y el empleado; acto que la mayoría de las veces va en desventaja para este último.

http://www.losandes.com.ar/notas/2011/3/18/avanza-congreso-para-servicio-domestico-556913.asp