La actividad económica avanzó 4,7 por ciento en septiembre respecto del mismo mes del año pasado, según el Indec. En los primeros nueve meses de 2013, el crecimiento ascendió a 5,4 por ciento interanual. El repunte de la construcción, de sectores industriales y de la cosecha del campo explicaron este mayor movimiento de la economía, tras la desaceleración del año pasado. El incremento del consumo privado, por la política de ingresos, también incentivó la expansión del mercado interno. En el Presupuesto 2014 se estimó que la actividad cerrará este año en 5,1 por ciento, lo cual implicaría el pago del Cupón atado al PBI por tres mil millones de dólares en diciembre del año que viene.

La construcción fue un factor importante para el incremento de la actividad económica. En septiembre, la edificación marcó un alza del 7,2 por ciento respecto del mismo mes del año pasado. Este desempeño se debió a la expansión de la obra pública. Por caso, la infraestructura vial registró una suba del 14,5 por ciento interanual. También se computó un fuerte avance en construcción social, producto de que este año se duplicó el presupuesto del Plan Federal de Vivienda, con el objetivo de atacar el déficit habitacional de sectores de menores recursos.

El dinamismo del gasto público dio evidencia del mayor esfuerzo inversor del Estado. Entre enero y agosto, las erogaciones de capital sumaron 55.033 millones de pesos, con un alza del 41,1 por ciento interanual. El detalle de estos gastos precisó que las transferencias a provincias ascendieron hasta 22.142 millones de pesos, al incrementarse 30,9 por ciento, mientras que la inversión real directa anotó una expansión del 35,2 por ciento interanual. Además de la obra pública, la construcción registró una mejor performance por el impulso estatal a través de Pro.Cre.Ar. Desde su puesta en marcha el año pasado, este plan de financiamiento barato y a largo plazo para la edificación de vivienda de particulares permitió iniciar 77 mil casas, al tiempo que ya fueron sorteados 158 mil créditos.

Más allá de su comportamiento en 2013, la actividad de la construcción tiene un importante de-safío para los próximos años. A diferencia de sectores como el automotor, con un fuerte desequilibrio comercial, la edificación se maneja con un bajo requerimiento de importaciones, lo que se combina con un importante efecto dinamizador para otras ramas de la economía, desde bienes de capital hasta la industria del plástico. Esto lo convierte en un sector imprescindible para impulsar inversión y demanda agregada, justo cuando el faltante de dólares (restricción externa) genera tensiones para sostener altas tasas de crecimiento.

Volviendo a los factores que estimularon la actividad económica en septiembre, algunos segmentos de la industria computaron un fuerte ritmo de expansión respecto del mismo mes del año pasado.

- La rama metálica básica avanzó 12,3 por ciento, lo cual se explicó por el incremento del 15,8 por ciento de la producción de acero crudo. Este desempeño fue a partir de la apertura de establecimientos que el año pasado habían frenado su actividad por paradas de mantenimiento técnico (Siderar y Acindar).

- El bloque de minerales no metálicos registró la mayor expansión del año, al avanzar 10,8 por ciento. Esto fue por el impulso de la construcción. Como resultado, la producción de cemento para el mercado interno anotó un avance del 15,1 por ciento interanual.

En cuanto al consumo, la facturación de supermercados ascendió hasta 10.779,2 millones de pesos en septiembre, con un alza del 22,6 por ciento respecto del mismo mes del año pasado. Las compras en shoppings alcanzaron 1893,6 millones de pesos, para aumentar 23 por ciento. A su vez, los pantetamientos de autos cero kilómetro sumaron 82.339 unidades, al crecer 27,6 por ciento. Para 2013, se espera que la comercialización de rodados nuevos marque un pico histórico. También se calculan records de venta para el mercado de vehículos usados y de motos. Este año, los viajes de turistas al exterior duplicarán el registro de 2006.

La negociación de paritarias, el incremento de jubilaciones, la suba de la Asignación Universal por Hijo y asignaciones familiares, la corrección en el Impuesto a las Ganancias cuarta categoría, entre otros, explicaron este desempeño del consumo en el mercado interno. La estabilidad del empleo local, pese a las tensiones mundiales en el mercado de trabajo, también fue central para sostener el nivel de demanda.

Informe: Federico Kucher.