La organización ambientalista Centro de Derechos Humanos y Ambiente (CEDHA) publicó un inventario de glaciares del proyecto minero Cerro Amarrillo de Malargüe, iniciativa que quedó en "stand by" el año pasado porque aún no estaba listo precisamente este estudio en la cuenca del Río Grande.

Este informe que se conoció revela la presencia de 30 cuerpos de glaciares en el área, incluyendo 13 glaciares blancos descubiertos y 17 glaciares de escombros. 

La superficie de hielo glacial presente en Cerro Amarillo sería de aproximadamente 3.73km2, repartida en 2.58km2 entre los glaciares de escombros y 1.15km2 entre los glaciares descubiertos. Estos glaciares se sitúan  entre los 2,740 y 3,690 msnm y abastecen principalmente a las cuencas del Río Grande y Río Salado.

De acuerdo a la organización ambientalista, esas cuencas hídricas aportan significativos volúmenes de agua para las comunidades y tierras agrícolas de las provincias de Mendoza, Neuquén, Río Negro, La Pampa y Buenos Aires. 

Entre las conclusiones del estudio, el CEDHA señala que "de avanzar el proyecto Cerro Amarillo, estos glaciares y los suelos congelados del ambiente periglacial situado en el territorio concesionado, podrían estar en peligro". 

Es por eso que el CEDHA instó a las autoridades públicas a no autorizar actividades mineras hasta que el Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (IANIGLA) termine su inventario de glaciares. 

“No basta con el inventario del IANIGLA porque el IANIGLA solamente revelará cuerpos de hielo que están a la vista, pero no hará un estudio acabado de los suelos congelados saturados en hielo, y esto es lo más importante para este tipo de zona, rica en suelos congelados, ambiente periglacial", señaló el director del CEDHA, Jorge Daniel Taillant.

Además agrega Taillant: “La Ley de Glaciares obliga a las entidades públicas y privadas a realizar inventarios prioritarios y también estudios especiales en los lugares donde coincide la actividad minera con zonas de glaciares y de ambiente periglacial, como es el caso de Cerro Amarillo. Aunque debería haberse publicado en el año 2011 estos estudios para todos los proyectos mineros hoy emplazados en zona de glaciares y ambiente periglacial, hasta la fecha, no hay nada desde las autoridades mineras ni ambientales. Están en falta. No están cumpliendo con la ley de glaciares".

Fuente: Centro de Derechos Humanos y Ambiente