Luego de las magras cifras que reportó en el 2012 la construcción, para este año hay perspectivas de que el sector repunte (ver aparte). Para proyectar cuánto será el aumento de la actividad en el 2013, no sólo se deberá tener en cuenta el índice inflacionario, sino también la demanda de mano de obra calificada que, según la Cámara de la Construcción, será "más alta que años anteriores" y, por tanto, 20 por ciento más cara que en el 2012.

Así lo afirmó ayer el titular de esa cámara empresaria, Fernando Porreta, quien aseguró que la cotización del trabajo calificado se debe a la cantidad de pedidos para obra gruesa y terminaciones finas. Esto, sobre todo, previendo que el Gobierno tiene en mente la construcción de unas tres mil viviendas para este año, además de las que ya están en ejecución, a través del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV), y las que corresponden al Procrear, el plan nacional de casas para la clase media.

"Hasta la construcción de 4.500 casas en un año podemos llegar a responder con mano de obra. Después de eso tenemos que pensar en opciones alternativas. La más urgente es capacitar gente para diferentes habilidades. Es necesario para nosotros contar con personal idóneo y, si hay más, los precios no se encarecen tanto", reclamó Porreta, en diálogo con El Sol.

PLANEAN ESCUELA DE MANO DE OBRA. No hay escuelas en Mendoza que dediquen todos sus esfuerzos a capacitar formalmente para trabajos de carpintería, pintura, encofrados, electricidad y construcción en seco, entre otros. Al menos en esto coinciden los empresarios de la construcción y el titular del Instituto Provincial de la Vivienda, Omar Parisi. Desde ambos sectores aseguran que más de una vez deben postergar trabajos hasta contar con mayor cantidad de mano de obra. Por este motivo, desde la Cámara de la Construcción ya tienen planeado un proyecto para crear una escuela técnica destinada especialmente a los oficios.

"No hay escuelas buenas para capacitar en mano de obra calificada", asegura el presidente de la cámara, donde el año pasado se desarrolló una experiencia piloto con cursos para arquitectos e ingenieros recién recibidos y que concluyó "con muchísimo éxito", según Porreta. La cámara presentará su proyecto al Gobierno provincial en abril, con el objetivo de que la escuela se cree con fondos mixtos: Estado, empresas constructoras y la cámara, que cuenta con un presupuesto exclusivo para la capacitación en el sector. La demanda más urgente es de electricistas, carpinteros, plomeros, yesistas, maquinistas, picapedreros y ceramistas.

El déficit en la mano de obra –según argumentan desde el sector– impacta directamente en la calidad del trabajo. "Tenemos dificultades con las terminaciones. Muchos no saben cómo trabajarlas y es necesaria la capacitación", cuenta Porreta. En esa línea, el presidente del IPV admitió: "Hemos tenido que rehacer trabajos porque estaban mal realizados. No sólo en las terminaciones, sino también en la obra gruesa. Y en eso se pierde mucho tiempo y plata", concluyó Parisi.

Diciembre tuvo 12,5% menos trabajo que en el mismo mes del 2011, pero hay optimismo

Los números de ocupación de mano de obra calificada en el 2012 se convirtieron en unos de los peores de la década, luego de la crisis 2001/2002. Según los cálculos de la Cámara de la Construcción de Mendoza, diciembre tuvo 12,5% menos trabajo que en el 2011, en el mismo mes. Sin embargo, para el titular de la cámara, Fernando Porreta, la cifra de diciembre no deja de ser alentadora, ya que si se compara con los meses anteriores del año pasado (sobre todo setiembre, octubre y noviembre), se registró un fuerte repunte. "Mejoramos respecto de los meses anteriores del 2012. En setiembre del año pasado teníamos cerca de 20% menos de ocupación de mano de obra respecto del 2011. Y más de 15% menos en octubre y noviembre", advirtió ayer Porreta. Ese 12,5% menos de mano de obra a fin de año equivale a unos 10. 500 trabajadores de la construcción en actividad. Este año esperan que la cifra repunte con la obra oficial.