El hospital regional Teodoro Schestakow tendrá para fines de 2014 un edificio destinado a un centro de rehabilitación que remplazará al actual servicio de fisiokinesiología y rehabilitación. El anuncio lo hizo el presidente del directorio de ese centro asistencial, el doctor Armando Dauverné.

El directivo viaja en los próximos días a Buenos Aires para ultimar detalles del acuerdo que permitirá construir las instalaciones con fondos nacionales.

Dauverné destacó que estos fondos nada tienen que ver con los que la Provincia destinará a construir el hospital pediátrico que, según resaltó, "también se hará pese a los malos augurios de algunos".

En definitiva, "este servicio de rehabilitación llenará las necesidades de quienes estén bajo atención en el nosocomio y los que se encuentren en estado de vulnerabilidad por no poseer obra social", dijo el director.

Agregó en su relato entusiasmado, que el monto a invertir superará los 3.000.000 de pesos y el proyecto ya está listo. "Voy a la Nación para acordar los nuevos costos porque el estudio y proyecto tiene un tiempo y hay que ajustar los números. Es casi seguro que este servicio estará funcionando a pleno a fines del próximo año cuando, quizá, yo ya no me encuentre al frente del hospital", reveló.

Entre los fundamentos del proyecto, Dauverné destacó que el crecimiento poblacional y desarrollo general de la Región ha derivado en múltiples consecuencias, entre ellas la complejización y aumento de áreas y servicios a prestar.

Afirmó que el aumento general de las prestaciones de kinesiología actuales "demuestra la relevancia que ha adquirido la rehabilitación desde el punto de vista de bienestar general del paciente y, sobre todo, su reinserción con mejor calidad de vida.

"Este incremento ha generado la insuficiencia general del servicio en cuestión que históricamente se ha visto cada vez más limitado en su espacio físico que se ve superado, muchas veces, en cuanto a la cantidad de pacientes como así también en la complejidad de los casos a tratar debido a la escasa infraestructura con que cuenta. Esta idea remplaza y reubica al actual servicio de Fisioterapia e incorpora otros aspectos importantes de la rehabilitación tales como gimnasia, hidroterapia y terapia ocupacional".

"El hospital es referente en prácticas de alumnos de la carrera de kinesiología de las universidades de la provincia como la de Mendoza y la Maza", detalló.

Para figurar el estado actual de ese servicio, apuntó que el espacio asignado hoy a esta especialidad es de 75 m2 por lo que se produce hacinamiento de pacientes en determinados horarios y a esto hay que agregarle la falta de ventilación y refrigeración.

"Es tan precario su funcionamiento -se lamentó- que en la actualidad comparte el patio con el servicio de Salud Mental. Tampoco este servicio tiene sanitarios suficientes ni acondicionados para personas con capacidades diferentes y también son ocupados por el personal. No hay sala de espera ni lugar para ocasionales acompañantes, los que deben aguardar a sus familiares en épocas de frío o intenso calor, en los pasillos de los consultorios externos", dijo.

Dauverné también indicó que según las estadísticas que se elaboran, más de 2.600 personas quedaron con incapacidades tras accidentes de tránsito. "Esta cifra señala que hay un salto cuantitativo desde 2009 a la fecha de casi un 2,5%", aseguró.

Dauverné dijo que se ha buscado construir un espacio acorde con la envergadura de lo regional que tiene el hospital que prevé "la atención para una población de más de 300.000 personas", ya que se recibe a gente de General Alvear, Malargüe y provincias vecinas.
 
"Éste debe convertirse -comentó entusiasmado el médico (de especialidad traumatólogo)- en el espacio de rehabilitación público de mayor importancia de la región y para ello se mejorará la eficiencia que permitirá la retención y recuperación de los pacientes".

Agregó: "También se ha previsto que en este centro se creen servicios para grupos de pacientes con patologías que actualmente se derivan a otros centros, entre ellos a los privados, como niños con enfermedades motrices, síndromes vestibulares, neurológicos crónicos, etc".

Al detallar cómo será el edificio, Dauverné resaltó que se prevén 500 m2 a construirse en la zona que da a los fondos del edificio que ocupa la Policía de Mendoza y a un costado del ingreso principal por calle Comandante Torres.

"Un cuerpo del edificio (denominado central, de 145 m2) tendrá una recepción y administración, sala de espera, enfermería, sala de reuniones, baños para hombres y mujeres adaptados. El ala norte (180m 2) contendrá dos consultorios, sala de terapia ocupacional, otra de hidroterapia con vestidor, una de tratamientos varios y psicomotricidad y un depósito con espacio técnico para un taller de prótesis y ortesis. En tanto el cuerpo sur, de 175 m2, cobijará un gimnasio y boxes", enumeró.

Cabe destacar que el doctor Dauverné resaltó la labor de la Cooperadora que será el organismo encargado de administrar los fondos y con ellos también se preverá el crecimiento del servicio en el futuro.

Todo el personal actual pasará a ese lugar y se agregarán más para completar la atención que se pretende sea, en un principio, de 8 a 20 todos los días.

El proyecto también incluye el equipamiento y todos los elementos necesarios para realizar tratamientos de rehabilitación.