Uno - Viernes 26 de octubre de 2012
El 70% de los desechos son botellas descartables. Calculan que es como si cada habitante de Mendoza arrojara un kilo de basura al año a los canales. Preparan una ley para tratar los envases PET.
Se calcula que cada habitante de las zonas urbanas de Mendoza arroja en promedio un kilo de basura por año en los canales de riego. Limpiar ese cúmulo de residuos sólidos urbanos en todos los cauces de agua de la provincia significó una inversión de $10 millones en 2012.
Para buscar una solución a este flagelo, que perjudica al recurso hídrico de Mendoza, es que el mes próximo presentarán un proyecto de ley sobre el tratamiento de envases plásticos. La idea central apunta a que se regule la actividad vinculada a la fabricación, comercialización y consumo de esos productos PET.
La iniciativa es de Irrigación, junto con la Dirección de Protección Ambiental y la Comisión de Ambiente del Senado, y surgió en el seminario Envases Plásticos y Ambiente, que se desarrolló recientemente en nuestra provincia.
Los puntos claves del proyecto de ley atacan tres frentes. Por un lado, el plan es limitar el uso de envases plásticos descartables en favor de los retornables y brindarles un beneficio a las personas que utilizan esta última clase de envases.
La segunda idea es establecer centros de acopio y reciclado de envases descartables, que se instrumentarían de la siguiente manera: el consumidor podrá entregar los envases vacíos en esos puntos estratégicos y a cambio recibirá un vale, que equivaldrá al 20% o 30% del valor del producto. Con eso se intentará disuadir a los consumidores para que no tiren los envases plásticos a la basura, sino que los canjeen para ser reciclados.
Otro objetivo es generar un fondo para mitigar los efectos de contaminación, y utilizar esos recursos en campañas de divulgación para concienciar a los ciudadanos y también en medidas de protección, como la colocación de rejas de contención de residuos en los canales de agua.
Al respecto, Mario Salomón, secretario de Gestión Hídrica de Irrigación, manifestó: “Falta compromiso, y hay que responsabilizar todas las facetas que intervienen y generan este problema”.
El 67% de la basura
Según destacó el funcionario, a través de la presentación de este proyecto de ley se busca “promover un debate sobre qué hacer con los envases plásticos, que hoy representan cerca del 67% de la basura que obstruye los canales”.
Agregó: “Sabemos que los generadores de estos residuos plásticos deberán revaluar costos de producción y tratamiento de los mismos, como también queremos que la sociedad tome conciencia del daño que producen estos residuos en el agua, que finalmente riega los alimentos que consumimos”.
En la misma sintonía, la senadora Raquel Muñoz, presidenta de la Comisión de Ambiente, manifestó que el principal desafío es concientizar a los usuarios a través de campañas sobre recolección de envases plásticos.
En este sentido, la legisladora confía en el aporte de las ideas de los estudiantes de escuelas secundarias y los centros de jubilados.
Problemas con estos residuos
Ese tipo de residuos plásticos no se degrada y para graficar la situación sólo basta considerar los siguientes ejemplos: una bolsa de nailon demora más de 15 años en degradarse y aún más tardan los envases de botellas plásticas descartables que no son biodegradables.
Además, los PET provocan otro grave inconveniente: cuando circulan por los cauces de agua acumulan en su interior líquido, que se descompone con microbios que contaminan el recurso hídrico y generan problemas de salubridad, agregó Salomón.
También hay que destacar otro inconveniente: las botellas plásticas provocan obstrucciones en las compuertas y dificultan la distribución del agua para el riego agrícola.
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