Hace cinco o seis siglos, en el tiempo que mucho después iba a darse en llamar Renacimiento, los artistas no podían subsistir si no era por la ayuda de sus mecenas. Estos acaudalados, miembros de la realeza o familias adineradas destinaban fondos para la creación artística, de manera que pintores, músicos y escritores pudieran dedicar su esfuerzo a las obras y no tirar por la borda su talento en otros oficios.

Como una manera de emular ese mecenazgo y a la espera de una ley que ordene tal apoyo al arte de una buena vez, el Ministerio de Cultura presentó ayer el “Programa Luis Quesada de apoyo a propuestas artísticas”, destinado a colaborar monetariamente con las obras de los hacedores artísticos locales.

En el acto participaron la ministra Marizul Ibáñez, Alfonso García (director del ECA) y Cecilia Gava (asesora del ministerio). Luego de la conferencia de prensa, Marizul detalló que este programa “no sólo es poco común, sino que pretende ser extendido a otras áreas culturales”. Según explicó, la idea es otorgar dinero “a 64 propuestas locales que se van a elegir a razón de 32 por semestre”. Estas propuestas serán para realización de obras (compra de materiales para una escultura, asesoramiento, etcétera) y para aspirar a ellas hay que presentar una descripción de tal proyecto o un boceto del mismo. Así, se otorgará entre $500 y $1.000 para cada realización.

El programa, que honra con su nombre a un destacado artista local (ganador de un Premio Escenario de Oro en 2010), incluirá también dos premios adquisición (el primero de $4.000, el segundo de $2.400) y dos menciones (de $1.500 cada una), todos a cargo de un jurado.

Marizul, además, adelantó que pronto se anunciará el regreso del Salón Fader de artes plásticas, que no se realiza desde hace 15 años y será el concurso para artes visuales más importante de Mendoza.