En Mendoza hay casi 7.200 embarazadas que están en condiciones de inscribirse, a partir de mayo próximo, para comenzar a cobrar la Asignación Universal por Hijo. Si cumplen con los requisitos establecidos, estas mujeres empezarán a percibir el 80% del beneficio (son $176, sobre $220) todos los meses hasta el nacimiento del bebé, cuando se les entregará el 20% restante acumulado. Esto último les corresponderá siempre y cuando acrediten haber cumplido con todos los controles médicos.

El beneficio alcanza a las futuras mamás que no tienen un trabajo formal, las que sean empleadas domésticas o bien aquellas cuyo salario sea igual o inferior al mínimo vital y móvil ($1.840). Podrán acceder a partir de la duodécima semana de gestación y siempre que se encuentren inscriptas en el Plan Nacer, el cual es motorizado desde 2005 por el Ministerio de Salud de la Nación. Para cumplir con este requisito sólo deben acercarse a un centro de salud o bien a un hospital público.

Autoridades de la ANSES y del Plan Nacer vienen manteniendo una serie de reuniones tanto a nivel nacional como provincial para comenzar a brindar el beneficio sin mayores contratiempos. Según contó la directora de Maternidad e Infancia del Ministerio de Salud provincial, María Susana Bresca, el resultado concreto de estos encuentros se percibirá en unos 15 días, “cuando lleguen las normativas específicas”.

La extensión de la asignación universal a las embarazadas fue anunciada por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a principios de este mes. El objetivo de la medida es lograr bajar la mortalidad infantil y de parturientas al obligarlas a practicarse los controles médicos de rigor.

“Es un sí a la vida, ya que les brinda a las mamás el derecho a la salud y les permite tener un embarazo saludable”, ponderó Héctor Rasso, titular local de la ANSES, quien ratificó que desde el 1 de mayo podrán inscribirse en las oficinas del organismo. A su vez, aclaró que “no se trata de un plan sino de un derecho”, a través del cual se “les da cobertura médica a ese bebé y a la mamá durante su embarazo”.

La contraprestación

Aquellas mujeres que se inscriban en mayo comenzarán a percibir el beneficio a fines de ese mes o bien a principios de junio, tal como informó Rasso. Como contrapartida se les exigirá que cumplan una serie de controles médicos.

En total, la mujer deberá realizarse cinco chequeos completos, un examen odontológico, análisis de sangre y de orina, deberá recibir dos dosis de vacuna doble durante el embarazo y una vacuna doble viral luego del parto, además de realizarse dos ecografías. Además, durante el tiempo que dure la gestación recibirá información sobre los cuidados que debe tener antes y después del parto.

En definitiva, esta población quedará al amparo del Plan Nacer y, por consiguiente, se le asegura una cobertura sanitaria completa.

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