Aumentar impuestos nunca es una tarea agradable para los funcionarios. Sin embargo, y aunque sea antipática tal situación, el gobernador Francisco Pérez se prepara para tomar la decisión política de incrementar la tarifa del agua antes de que termine el año y con ella cubrir el déficit operativo que tendrá Aysam para el período 2012-2013 y que será de 69 millones de pesos.

"El déficit es razonable, acorde con el aumento de precios y el incremento de paritarias. Es un déficit calculado desde septiembre de 2012 a septiembre de 2013 y compromete el funcionamiento básico de la empresa como los sueldos, el mantenimiento general, el combustible, entre otros puntos", explicó el titular de Aysam, Luis Bohm, quien agregó:

"El déficit se puede financiar de tres modos: aumentando la tarifa solamente, continuando con los aportes de capital que realiza el Ejecutivo o bien, combinando las dos opciones, es decir tocando la tarifa pero continuando con los aportes de capital". La última opción, la mixta, es la más viable para el Estado ya que si sólo se cubre el déficit con la tarifa, el incremento debería ser "muy alto" y de profunda sensibilidad social. No obstante, para el período 2011-2012 el déficit plano proyectado rondaba los 30 millones de pesos. Hoy esa cifra se duplicó.

Si bien las reuniones para ir analizando el impacto tarifario entre Bohm y el gobernador arrancarán hoy, la realidad es que la definición deberá darse antes de que termine el año. Al menos así lo estipula la normativa de financiamiento de Aysam, la 8.270, mediante la cual se financia con 22 millones para 2011 y 11 millones para 2012 el funcionamiento operativo y entiende que mientras tanto se tiene que adaptar o actualizar la tarifa.
 
De tal forma que el incremento del agua tiene un aval legislativo que permite otorgar hasta tres aumentos durante 12 meses. Pero además, con el último decreto que firmó Celso Jaque antes de terminar su Gobierno (el del incremento del agua) estableció la potestad de realizar ajustes semestrales.

"La tarifa está desactualizada", reconocen desde el Ejecutivo. De hecho desde la empresa aseguran que para equipar los costos con los ingresos de la empresa se necesitaba un aumento de 50 por ciento durante todo 2012. Incluso la idea original (que no se ejecutó) era incrementar la tarifa un 25 por ciento en junio y otro 25 por ciento en diciembre. Ese número, es decir, 25 por ciento es parte de lo que se está especulando podría ser el techo para el aumento antes de que arranque el 2013.

Pero para no generar malestar social, Pérez espera el dictamen final del EPAS, a cargo de Javier Montoro, quien prometió tener las auditorías en una semana y media. "En dos años sólo se incrementó la tarifa un 35 por ciento.
 
El EPAS está auditando las cuentas de septiembre y octubre para emitir el dictamen final", y agregó: "El gobernador nos viene pidiendo una gama variopinta de valores y de posibles impactos". A modo de ejemplo el funcionario de Aysam explicó: "Si se aumenta 10 por ciento hay que ver cómo impacta a cada sector. Unos 16 mil usuarios tal vez paguen 2.70 pesos más bimestralmente, por decir. Se trata de ver el impacto monetario grupo por grupo".

"Nosotros vamos a llevar todas las posibilidades porcentuales. Desde el 10 hasta el 60 por ciento y su impacto directo para que el gobernador sea quien defina el incremento final. Lo importante es ver cuáles son los efectos sobre el usuario". Otro punto que también determinará el mandatario es si el aumento se hace de una sola vez o si será escalonado.

El otro punto que explicó Luis Bohm fue el de los subsidios que, en alguna oportunidad del gobierno anterior, trascendió la posibilidad de que la Nación otorgara subsidios para el sistema hídrico. Lejos de eso, Bohm aseguró: "Los subsidios son sólo provinciales y están focalizados en dos sectores. Los jubilados y pensionados y las personas carenciadas".

Según detalló el funcionario, de un total de 180 millones de pesos que maneja la empresa, 4.800.000 de pesos van destinados a subsidios. Más allá de los análisis finos que arrancará desde hoy el Ejecutivo, lo cierto es que quien tiene la palabra final para el incremento de la tarifa es Francisco Pérez, quien públicamente sólo ha dicho "lo estamos analizando".