A través de una disposición del Ministerio de Salud de la Nación se obligará a las tabacaleras y distribuidoras de productos elaborados con tabaco a concientizar sobre los daños que producen estos productos en la salud, el ambiente y la sociedad. La disposición fue publicada ayer en el boletín oficial y dispone que 50 por ciento del envase de cigarrillos sea ocupado con imágenes y leyendas sanitarias impactantes para que la población cese el consumo.

La imagen será impresa en la cara principal más visible al consumidor. Por su parte, en la parte posterior se podrá observar frases como “Fumar causa adicción”, “Fumar causa enfermedades cardíacas y respiratorias”, “Fumar causa muerte por asfixia”, “La mujer embarazada que fuma causa daños irreparables a su hijo”, “Fumar quita años de vida”, entre otras. La primera de las 10 leyendas que circularán será “Fumar causa cáncer”.

Los laterales, en tanto, estarán dispuestos para informar a los consumidores el número de teléfono y la página web del Programa Nacional de Control de Tabaco que lleva a cabo el Ministerio de Salud.

Se trata de la resolución 497/2012, la cual establece nuevas normativas de Gráfica de Empaquetado, Venta y Consumo de Productos de Tabaco. La disposición se encuadra dentro de la Ley 26.687 sancionada en julio del año pasado que regula la publicidad, promoción y consumo de los productos elaborados con tabaco a los fines de la prevención y asistencia de la población ante los daños que produce el tabaquismo.

No sólo el packaging estará afectado por la normativa, también los comerciantes deberán realizar algunos cambios en sus locales exhibiendo en un lugar visible un cartel en el cual se lea la leyenda: “Prohibida la venta, distribución, promoción o entrega, bajo cualquier concepto de productos elaborados con tabaco a menores de 18 años. Ley 26.687. 0-800 999-3040. controldetabaco@msal.gov.ar”.

Por su parte, los lugares libres de humo de tabaco también deberán colocar cartelería que indique la prohibición y el número de ley.

Según informó el Ministerio, las tabacaleras, los distribuidores y los comerciantes tendrán un plazo no mayor a 60 días para adecuarse a la normativa y realizar los cambios pertinentes. Cumplido este período se sacarán de circulación los envases que no contengan los datos previstos.

Hasta el momento, muchos comerciantes del microcentro mendocino afirman no haber sido informados de estos cambios, pero descreen que la medida tenga repercusiones en los niveles de consumo. “En los jóvenes puede causar impacto, pero en los fumadores adultos influye más el aumento de los precios; si se unen las dos cosas puede que muchos dejen de fumar”, comentó una comerciante de calle Garibaldi.

“Cigarrillos es lo que más se vende, no importa el precio o si los paquetes te digan que te vas a morir”, aseguró Marcos, empleado de un minimarket de calle San Martín.

Fumadores escépticos

Mari fuma hace 30 años, no se considera una fumadora compulsiva, pero asegura que su consumo aumentó al tener que dejar Buenos Aires para venirse a vivir a  Mendoza. “Me parece muy bien que se hagan estos cambios, pero no creo que deje de fumar por una imagen. Yo respeto mucho los espacios libres de humo, pero también quiero que se respete mi decisión de querer fumar”, comentó.

A su turno, Mariana opinó: “Me parece bien que se hagan campañas de concientización pero todos los fumadores sabemos cuáles son los riesgos que corremos al fumar”.

Por su parte, Federico se había tomado un recreo en el trabajo para fumar en la vereda. Este joven de 26 años comenzó el consumo de cigarrillos a los 16 años y admite fumar mucho; sin embargo, asegura que la nueva normativa es positiva para que los chicos no comiencen con este vicio. “Te hace muy mal fumar, uno se siente mejor cuando lo deja, pero bueno... no se puede, es muy difícil”, aseveró.

“Está bien para concientizar; va a causar mucho impacto y a alguien ‘le va a caer la ficha’”, comentaba Franco quien compartía un cigarrillo con un amigo en la plaza Independencia.