Las heladas y la menor superficie para cultivar generaron un aumento en los precios de verduras y hortalizas en la provincia que hizo bajar el consumo. Esto motivó a que miles de mendocinos buscaran otras variables, entre éstas, cultivar en sus huertas familiares, en macetas y canteros.

“Esta temporada fue explosiva la demanda de semillas por parte de los productores y de la gente en general para las explotaciones familiares y las pequeñas huertas”, contó el ingeniero Guillermo Guida, coordinador provincial del Programa Pro Huerta de Mendoza, que se concreta a través del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).

“La demanda de semillas ha sido muy importante y nos superó totalmente. Por este año, ya no tenemos más semillas para entregar”, destacó Guida.

“Nosotros atendemos 30.000 huertas familiares en toda la provincia, pero la demanda que tuvimos equivale, prácticamente, a 5.000 huertas más”, estimó el ingeniero; en base a esta necesidad es que se preparan para la temporada de otoño-invierno.

El programa Pro Huerta reparte tres paquetes distintos: huertas urbanas, típicas para zonas rurales y bolsones para explotaciones de una hectárea o más.

Las semillas son para tomate perita y redondo, chauchas, maíz, zapallos, lechugas y la novedad de estos meses es que también entregan cortezas para papas y ajos. En un mes, piensan desde el INTA, estarán distribuyendo plantines de batata.

De las 30.000 huertas, la mayor cantidad de éstas se concentra en los departamentos de San Rafael y General Alvear. También en la zona Este hay un importante número de huertas.

El ingeniero Guida explicó que “el pedido de semillas ya no es solo para aquellos que tienen necesidades económicas, sino que se extiende también a gente que quiere consumir productos más sanos y sin tóxicos", manifestó.

Hacer economía y cuidar la salud

“Las limitaciones económicas impulsan a muchos a buscar mejores precios pero también a cuidar la salud”, dijo la licenciada en Nutrición María Eugenia Muñoz de Chechi.

Reconoció que: “Hay una tendencia a comer sano, ya sea cultivando en casa o comprando productos orgánicos”.

La especialista en Nutrición destacó que esta es una tendencia que crece. "Mucha gente va directamente a las fincas y le compra a los productores bolsones de verduras. Bajan los precios y se llevan verduras frescas y sanas. También conozco un grupo de productores de Las Heras que se reúnen un día por semana y llegan directamente al consumidor en un lugar determinado", recalcó.

Muñoz de Chechi manifestó que: “Hay que crear conciencia para comprar las verduras de estación porque son más económicas. Hoy pueden ser alcauciles, espárragos, brócoli, coliflor, repollos, berro, hinojo.

Mientras tanto, el aumento de los precios lleva a buscar alternativas, por ejemplo, lo que están haciendo muchas amas de casa. Isabel, de Las Heras, dijo que las comidas que hace “son muy sencillas y con muchas verduras. Y cuando puedo, aclara, hago el pan en casa”.

Por su parte, Inés, de la Cuarta Sección de Capital, afirmó que “no solo camino buscando mejores precios sino que cultivo tomates perita en el cantero que tengo en casa. Me aseguro unos hermosos tomates y bien baratos”.

En tanto, desde Chacras de Coria, Miriam destacó que ella como sus amigas tiene “en macetas, algunas plantitas cuyas hojas usamos para dar distintos gustos a las comidas. Y por supuesto, cuando salimos al almacén compramos estrictamente lo necesario”.