La comuna de Santa Rosa realizó un relevamiento en los principales distritos y llegó a la conclusión de que existen algo más de 300 lotes baldíos ubicados en zonas urbanas, que se encuentran en situación irregular. En algunos casos ocurre que no se conoce a sus dueños; en otros, se ha determinado que los supuestos papeles de propiedad no están en orden y también hay un tercer grupo de lotes con deudas impositivas tan importantes, que ese monto llega a competir con el valor mismo del lote.

Con ese diagnóstico en la mano, el intendente Sergio Salgado ha decidido avanzar con un proyecto que promete alguna polémica, ya que la comuna pretende que a través de una ley aprobada por la Legislatura, la provincia expropie esos 300 lotes, para luego cederlos al municipio. Finalmente y con los títulos de esas tierras en mano, la comuna quiere venderlos a muy bajo costo, a condición de que el comprador comience a edificar en un plazo no mayor a los 24 meses.

"En Santa Rosa se da una curiosa paradoja: si usted hace una recorrida por el pueblo verá que hay decenas de baldíos, pero la verdad es que si pretende comprar alguno de esos lotes se va a encontrar con que prácticamente no hay quien le venda", dice el intendente Salgado y completa: "Y si no hay quien venda, en general es porque sus dueños se murieron hace años".

Lo que pretenden el municipio ahora es avanzar en la Legislatura con un proyecto de ley que permita expropiar esos terrenos. Dicen desde el Ejecutivo que la conversaciones con los legisladores de la zona Este están avanzadas y que enviarán el proyecto en unos diez días más.

Búsqueda de terreno

El problema no es nuevo y hace ya unos siete años, la comuna intentó una solución para aquellos baldíos abandonados en los que se conoce al propietario, y a través de herramientas legales los intimó a construir o a cerrar los terrenos; incluso, en ese momento el municipio decidió aumentar considerablemente las tasas que se pagan por un baldío, pero lo cierto es que en la mayoría de los casos no hubo cambios y las tierras solo sumaron mayores deudas.

"Hace años que busco un terreno en el centro de Santa Rosa y es imposible comprar porque algunos están en sucesión y de otros no se conocen los dueños", cuenta Rosa, una vecina del lugar que vive en la casa de su madre: "Lo único que queda es conseguir uno lejos del pueblo, pero el problema es que allí no están todos los servicios", asegura la mujer.

El intendente Salgado aspira a que su proyecto termine por resolver varios problemas: por un lado, el de los terrenos sin uso, cuya sola existencia frena el desarrollo de las zonas urbanas del departamento, al tiempo que le arriman inseguridad y suciedad al pueblo; pero también, el de las familias que necesitan tener un lote para sacar un crédito y construir. "Todas las operatorias de vivienda le piden a los interesados tener un terreno propio y es una picardía que habiendo tanto baldío en Santa Rosa, las familias no cuenten con un lote", dicen en el municipio.

Construcción rápida

El relevamiento realizado por la comuna señala que la mayoría de los terrenos abandonados están en Las Catitas, que hay un segundo grupo de algo más de 50 lotes en la villa cabecera y una cifra similar en La Dormida: "Estamos hablando de tierras por las que nadie reclama, de terrenos que por ejemplo, siguen a nombre de Arenas Raffo o de Eliseo Ortiz que fue gente que participó de la fundación de este pueblo", detalla Salgado y sigue: "Vamos a llevar el proyecto a la Legislatura y si se aprueba, lo único que vamos a exigir a las familias que compren, es un compromiso de comenzar con la edificación en menos de dos años".