Llegaron las temperaturas bajo cero y, con estas, el riesgo de caer en cama ante los primeros fríos. Pero la buena noticia es que la lucha para evitar el brote o rebrote del virus de la gripe A, una de las variantes de la influenza, dio resutados este año en Mendoza, para alivio de médicos y pacientes. Según el Centro de Vigilancia Epidemiológica de la Provincia, ya no circula el virus por estos lares y sólo se presentan cuadros gripales con virus estacionales que "están lejos de ser peligrosos para la mayoría de los pacientes que los padecen.

El virus influenza el año pasado y el anterior no mutó y hay mucha más gente inmunizada", aseguró a este diario Rubén Cerchiai, director del Vacunatorio Central. De acuerdo con las muestras que se sacan de forma aleatoria en el Centro de Vigilancia, el virus no se ha manifestado hasta estos días. De diez casos de cuadros gripales, se analiza uno y, hasta ahora, los especialistas no encuentran el virus conocido también como H1N1.

El dato lo ratificó también ayer Ramón Alchapar, jefe del Servicio de Neumonología del Hospital Lencinas. Entrevistado por El Sol, el médico explicó que "hay consultas, pero de cuadros cada vez más leves, al menos en lo que a virus gripales se refiere". "Creo que el incremento de consultas es propio de la estación invernal pero se ha disminuido la gravedad de los cuadros debido al aumento de vacunas antigripales este año", agregó Alchapar.

La tendencia fue confirmada enseguida por el titular del Vacunatorio Central, puesto que, durante este año, se colocaron 160 mil dosis antigripales, mientras el año pasado, en estas fechas, sólo se habían puesto cerca de 90 mil. Sucede que, ante la amenaza de contraer gripe A (de origen porcino, fue una pandemia en el 2009 y su denominación clínica es H1N1), muchos mendocinos salieron en masa a vacunarse para prevenir la severidad del cuadro. Este año, la cifra de inmunizados ascendió casi al doble respecto del año pasado.

En el 2010, la Organización Mundial de la Salud anunció el fin de la pandemia. Se estima que hubo 19.000 casos de contagio. Sin embargo, Cerchiai prefiere no limitarse a las vacunas antigripales como único motivo de desaparición del virus. Según el profesional, hay varios factores que causaron esta merma en la enfermedad.

Uno se vincularía con las temperaturas cálidas que se mantuvieron hasta hace pocas semanas; otro, los enfermos del año pasado que están inmunizados, y, por último, la efectividad de la vacuna antigripal, potenciada por la falta de mutación del virus de la gripe. "Por un lado, tenemos un invierno tardío. Recién en las últimas dos semanas hemos sentido temperaturas bajas.

Por otro lado, también influye que muchos de los que tuvieron gripe en el 2011 este año ya están inmunizados, porque el virus influenza no ha mutado y se mantiene. Los vacunados de este año también están inmunizados, al igual que los que se inocularon hace pocos meses", se explayó Cerchiai, quien asegura que, aunque se ven en los consultorios cuadros gripales, estos son "leves y propios de la época, sin que padezcan el virus influenza".

MUTACIÓN DEL VIRUS EN EL 2013. Según Cerchiai, los laboratorios principales del hemisferio Norte ya están alertando que para el 2013 habrá una nueva mutación del virus y, por ende, habrá que modificar las estrategias de prevención y tratamiento, es decir, en vacunas y medicamentos. "Se espera un nuevo virus y hay que estar atentos para el año que viene", dijo el titular del vacunatorio, aunque para este invierno prefiere mantener "el optimismo".

Según coinciden los especialistas, por estos días se están registrando más casos de enfermedades estacionales en las vías aéreas superiores, como sinusitis, bronquitis, laringitis o bronquiolitis (sobre todo, en menores de 2 años). Alchapar, por su parte, aseguró que, desde que llegaron los fríos más crudos, también se ven cuadros gripales pero con disminución de gravedad. "Salvo que el paciente traiga una enfermedad de base más compleja", aclaró el médico.

Prevenir

Los expertos, como cada año, dan una serie de consejos a la población para evitar que haya cuadros infecciosos. -No reunirse en espacios completamente cerrados. -Mantener la estufa a temperatura templada y dejando siempre una ventilación. -Al salir a la calle, taparse la boca y la nariz para calentar el aire que se respira. -Tomar mucho líquido y jugos de fruta para hidratarse. -No automedicarse en caso de infección (fiebre).