Los argentinos siguen viajando al exterior, pero la llegada de turistas al país retrocedió. Las restricciones para la compra de divisas no fueron un limitante para las 231.089 personas que tomaron un avión en enero para salir del país. La cifra representa un crecimiento de 5,3 por ciento respecto del mismo mes del año anterior y no contempla a quienes viajaron en otros medios de transporte a destinos limítrofes como Brasil, Uruguay o Chile. Los datos de la Encuesta de Turismo Internacional que elabora el Indec muestran que durante el primer mes del año el turismo receptivo cayó hasta 246.539 individuos, una fuerte merma de 12,4 por ciento. Ese comportamiento estuvo encabezado por la menor llegada a Ezeiza y Aeroparque de viajeros desde Brasil y Europa.

En enero, los turistas argentinos que salieron del país en avión gastaron 215 millones de dólares, mientras que los visitantes extranjeros dejaron 245 millones de dólares. La cifra arroja un saldo positivo de 30,6 millones, que se encuentra por debajo de los 90 millones de dólares registrados en el mismo período el año pasado.

Los resultados de la encuesta del organismo estadístico muestran la continuidad de la caída observada a lo largo de 2012 en el turismo receptivo. Los datos evidencian un fuerte impacto en la llegada de visitantes de larga distancia. Las principales bajas se concentran en los turistas provenientes de Estados Unidos, Canadá y Europa, pero también muestran un retroceso del ingreso de turistas brasileños.

La merma del 29,0 por ciento en los arribos desde el país vecino responde a varios factores. Un primer elemento que explica la menor llegada de brasileños es la caída en la actividad económica el año pasado. Al mismo tiempo, en términos bilaterales, el tipo de cambio que ofrece Argentina se volvió menos atractivo para los turistas del país vecino, que siguen siendo quienes más gastan por día en el país, con un promedio de 140,9 dólares. Más allá de la cuestión cambiaria, algunos analistas agregan otro elemento de análisis vinculado con la diversificación de destinos de la clase media brasileña y la activa política norteamericana para atraer a sus turistas. Junto con las facilidades para acceder a los visados para ingresar a Estados Unidos, que se ofrecen en algunos sho-ppings de las principales ciudades del país vecino, también influye la deflación de precios en los principales destinos del sur, fundamentalmente en Florida.

A pesar de la caída observada, la llegada de turistas brasileños se encuentra en niveles históricamente elevados. El mes pasado llegaron a los aeropuertos argentinos 60.769 visitantes desde ese país, una cifra significativamente mayor a la de 2004. Los brasileños se quedan una semana en el país y son los que más gastan. Por su parte, los europeos realizan estadías más prolongadas de veinte días con un presupuesto más acotado, 51 dólares por día en promedio. Las visitas desde Uruguay duran poco, cuatro días, con un gasto diario de 82 dólares, mientras que los viajes desde Chile tienen un promedio de nueve días con erogaciones por 86 dólares.

Los destinos predilectos, aunque no figuran en la encuesta, siguen siendo Brasil, Miami y el Caribe. El gasto diario promedio de los argentinos que viajaron al exterior durante el primer mes del año fue de 65 dólares diarios, uno por ciento más que en el mismo período de 2012. El titular de la AFIP aseguró el lunes que la autorización de compra de moneda extranjera para viajar al exterior ronda entre “los 80 y 100 dólares por día, que es lo que se necesita para consumir, eso es lo que se está evaluando al momento de hacer esa autorización”, dijo Ricardo Echegaray. “Estamos teniendo en cuenta los informes de turismo, de cuánto dinero consumen los argentinos en el exterior y cuánto consumen los extranjeros en Argentina. En función de eso estamos autorizando volúmenes”, explicó el funcionario.