Reforzar los lazos de convivencia entre alumnos, padres, docentes, no docentes y directivos dentro de la escuela, es una consigna indiscutible a la hora de mejorar la calidad de la enseñanza. Por eso, este año todas las escuelas de la provincia tendrán la oportunidad de participar de una encuesta en la que los alumnos podrán reflejar sus inquietudes sobre las situaciones que viven dentro del aula, en forma anónima y desde su experiencia personal.

El trabajo de investigación, que está avalado por la Dirección General de Escuelas (DGE), busca tomar el pulso a 90 mil estudiantes de los niveles primario y secundario.

Las hojas con las 21 preguntas comenzaron a entregarse en las escuelas a fines del año pasado, en el marco de una investigación que está llevando adelante el especialista en violencia escolar, Alejandro Castro Santander. Pero como la idea es continuar el estudio durante los primeros meses de este ciclo lectivo, la propuesta sigue vigente para las instituciones que crean oportuno sumarse a la iniciativa.

En el caso de los colegios que por distintos motivos no tengan copias del formulario, podrán solicitarlo en la DGE en forma directa. De cada escuela se tomará un grupo integrado por alumnos de diferentes años que estén dispuestos a responder. Luego, el material deberá ser enviado en un sobre cerrado al área de supervisión correspondiente al colegio.

Las conclusiones estarán listas hacia mediados de año y permitirán conocer a ciencia cierta cuál es el clima que se vive en cada colegio. También se sabrá cómo es el trato que cada estudiante recibe por parte de sus compañeros y cuáles son los tipos de problemas más frecuentes dentro del aula. Así, ellos podrán exteriorizar si sufren algún tipo de violencia (visible, como golpes o insultos o bien no visible, como ser víctimas de hurtos).

La encuesta también interroga sobre posibles dificultades a nivel comunicativo y pide especificaciones sobre los lugares más frecuentes en los que se generan los conflictos. "Una vez que tengamos los resultados, podremos enviar una respuesta a cada colegio con las recomendaciones y pautas que les convendrá seguir para resolver los problemas", explicó Castro Santander, quien integra el Directorio del Observatorio Internacional de la Violencia Escolar y, además, es asesor de Gabinete de la DGE.

Al mismo tiempo, la muestra con las respuestas anónimas de los 90 mil alumnos mendocinos de escuelas públicas primarias y secundarias, será comparativa a la que se tomó en países como México, Colombia, Venezuela, Paraguay, Chile y Brasil. Hasta ahora, los resultados preliminares demuestran que las agresiones "cara a cara" van perdiendo terreno frente a las formas de hostigamiento que se dan de la mano de las nuevas tecnologías, como los mensajes de texto e internet.

Este acoso virtual, que ocurre sobre todo entre adolescentes, ha dado lugar al concepto de "cíber violencia". De hecho, estudios previos han demostrado que al menos 3 de cada 10 adolescentes asumen haber sido víctimas de esta clase de violencia.

"Suponemos que la tendencia es que esto se ha ido generalizando", agregó el especialista y advirtió que el anonimato que permiten las nuevas tecnologías es una de las causas que colabora a que las burlas (o bien el acoso virtual) se refuercen como una forma más de agresión entre los mismos compañeros de escuela. Sacar fotos o grabar videos y luego subirlos a Facebook o enviarlos vía e- mail son algunas de las modalidades más frecuentes. Esto ocurre porque así es más sencillo esconder la verdadera identidad.

De allí la importancia de dar a los profesionales de la educación herramientas adecuadas para trabajar con los alumnos y sus familias. "Es muy importante que cada colegio se acostumbre a la autoevaluación para poder solucionar los inconvenientes", deslizó el investigador.

http://www.losandes.com.ar/notas/2011/3/17/encuesta-permitira-medir-como-convivencia-escolar-556706.asp